Reseña: Las Crónicas de Narnia. El león, la bruja y el armario

Terminé este libro hace varios días, pero como he estado muy ocupada con los exámenes y dejando entradas programadas para otros días, pues no he tenido tiempo.
Ahora sí, puedo empezar con la reseña.

En primer lugar, la historia me pareció exquisita. Es uno de esos libros que te transportan lejos y te hacen soñar. 




Leerlo antes de dormir era genial, te dejaba esa sensación dulce de tener buenos sueños. 
El gran problema de esto, fue que al llegar a los capítulos finales, no pude parar de leer y me quedé hasta tarde para terminármelo. Mereció la pena, porque me fui a dormir muy tranquila y tuve sueños con Narnia.



En segundo lugar, los personajes. Edmund me pareció repelente, aunque no fuera culpa suya (o al menos no del todo) me pareció un poco "zorro" ya sabes, un poco traidor. 

Lucy fue realmente adorable y me recordó a mí misma cuando era pequeña, con esa inocencia y dulce carácter que me ha desaparecido con el paso de los años. 


Susan me pareció poco desarrollada como personaje, se podía haber sacado más provecho de ella. 
Y Peter, bueno, Peter no es que esté mal, pero no me cae bien, no sé por qué. Tal vez porque mi favorita es Lucy, y no me gustó que dieran favoritismos a Peter por ser el "primogénito". Pero bueno.

La evolución me la esperaba por la película, aunque me sorprendió ver la de cosas que habían cambiado y añadido de un libro tan corto (en mi opinión) para adaptarlo a la gran pantalla.

No quiero hacer spoilers, pero me traumatizó enterarme que Lucy era rubia y los demás todos morenos. Es que Lucy me la estuve imaginando pelirroja como en la película, hasta que en cierto momento del libro descubrí que era rubia, y me quedé como: WTF?! Infancia destruida.

El caso, detalles a parte, me gustó mucho y por supuesto amé a Aslan y lloré por Aslan, pero le adoro.
Lo recomiendo 100 % y creo que es la historia perfecta que contar o leer antes de dormir.